Publicación:
Diferencias y similitudes del perfil de capacidad intelectual dentro del espectro del autismo de alto funcionamiento : implicaciones educativas

Cargando...
Miniatura
Fecha
2014-06-13
Editor/a
Director/a
Tutor/a
Coordinador/a
Prologuista
Revisor/a
Ilustrador/a
Derechos de acceso
Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 Internacional
info:eu-repo/semantics/openAccess
Título de la revista
ISSN de la revista
Título del volumen
Editor
Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Facultad de Psicología. Departamento de Psicología de la Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológicos
Proyectos de investigación
Unidades organizativas
Número de la revista
Resumen
Hasta llegar a la situación actual, son muchos los estudios publicados que han comparado el Trastorno Autista de Alto Funcionamiento versus el grupo de Síndrome de Asperger intentando buscar diferencias y similitudes entre ambas condiciones alrededor de diferentes áreas: severidad de síntomas, historia obstétrica, desarrollo motor, problemas conductuales y psiquiátricos; comparación en la evolución de los síntomas y su pronóstico; comparación en las características formales y pragmáticas del nivel de lenguaje, perfil neuropsicológico, nivel de adaptación funcional etc¿sin llegar a conclusiones concluyentes que justificasen de que se trataban de dos entidades nosológicas diferentes (Carpenter, Soorya y Halpern, 2009; Wilkinson, 2010). El presente trabajo se centra en el estudio del perfil de capacidad intelectual del grupo de autismo de alto funcionamiento. Para este grupo el instrumento más utilizado para valorar la capacidad intelectual de los niños/as es el test de inteligencia. Y de todos los test y formatos existentes, la escala de Wechsler es la más utilizada por los profesionales en el ámbito clínico, psicopedagógico (Kamphaus, Petoskey y Rowe, 2000) o de patología del lenguaje ante cualquier consulta. Objetivos El objetivo del estudio ha sido abordar dicha cuestión comparando los perfiles de capacidad intelectual de ambos subtipos a través de dos de las versiones del test de capacidad intelectual estandarizada del Weschsler en un grupo de sujetos mayores de 6 años, con la finalidad de aportar información adicional que permita validar o no las actuales separaciones de ambos trastornos en la clasificación del DSM-IV. Así mismo, se pretende analizar el perfil cognitivo de ambos grupos y valorar si se les puede identificar y relacionar con un perfil de capacidad intelectual "propio", diferente del de la población general. La hipótesis es que no se encontrará diferencias más allá de aspectos relacionados con el factor del lenguaje que queda recogido en los criterios diagnósticos de cada categoría. Los resultados obtenidos apoyarían y apuntarían en la dirección de la nueva clasificación diagnóstica actual del DSM 5. Metodología La muestra estará formada por un total de 160 sujetos, 68 con criterios para el diagnóstico de Trastorno Autista Alto Funcionamiento (TAAF), de entre los cuales 9 son mujeres y 59 varones; y 92 sujetos con criterios para el diagnóstico de Síndrome de Asperger (SA), de entre los cuales 14 son mujeres y 83 varones. En ambos grupos el rango de edad iría de los 7 a los 16 años. Conclusión Como conclusión, aunque la diferencia en los perfiles cognitivos entre el Trastorno Autista de Alto Funcionamiento versus el Síndrome de Asperger no es consistente en los diferentes estudios, si que parece observarse una tendencia a que el grupo de Síndrome de Asperger (sin retraso en el inicio de palabras ni frases) muestre puntuaciones más elevadas en las tareas verbales en comparación con el Trastorno Autista de Alto Funcionamiento (retraso claro en el inicio de las palabras y frases). Parece que el grupo con Trastorno Autista de Alto Funcionamiento presenta puntuaciones significativamente superiores en las tareas visoperceptivas por encima del resto de tareas. Ambos grupos suelen presentar dificultades en las tareas que forman parte de los índices de Memoria de Trabajo y Velocidad de Procesamiento. Si se observa el perfil propio de cada grupo, se observan discrepancias de funcionamiento en ambos grupos. Por ello, el perfil obtenido con el WISC-IV no puede ser utilizado como un criterio de confirmación o descarte de uno de los cuadros diagnósticos. Los resultados del presente estudio no justificarían el Síndrome de Asperger como entidad nosológica diferenciada al resto de los Trastornos del Espectro del Autismo, sino como parte del continuum del cuadro que se diferencia por severidad de síntomas.
Descripción
Categorías UNESCO
Palabras clave
Citación
Centro
Facultad de Psicología
Departamento
Grupo de investigación
Grupo de innovación
Programa de doctorado
Cátedra
DOI
Colecciones