Examinando por Autor "Alted Vigil, Alicia"
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Publicación Arquitectura social y estado entre 1939 y 1957 : La Dirección General de Regiones Devastadas(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Facultad de Geografía e Historia, 2009-02-27) Más Torrecillas, Vicente Javier; Alted Vigil, AliciaPublicación Arturo Soria y Mata. Una biografía (Resumen)(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Escuela Internacional de Doctorado. Programa de Doctorado en Historia e Historia del Arte y Territorio, 2017-06-01) López Rodríguez, Armando; Alted Vigil, AliciaLa información biográfica conocida hasta la fecha sobre Arturo Soria y Mata consiste fundamentalmente en el sucinto repaso a su vida que, a modo introductorio, ha precedido a algunas de las investigaciones hechas sobre sus aportaciones al campo del urbanismo. Es indudable que la obra por la que es hoy en día reconocido es la Ciudad Lineal de Madrid, por tanto no es de extrañar que la mayoría de las monografías existentes se hayan focalizado casi en exclusiva en esa contribución. Sin embargo, Arturo Soria estuvo ocupado a lo largo de su vida en múltiples y variadas actividades de todo tipo, que aunque para él fueron tan relevantes como las tradicionalmente destacadas, a día de hoy son prácticamente desconocidas. Esta tesis doctoral profundiza en todas esas facetas desplegadas por Arturo Soria con la intención de componer su biografía completa desde un punto de vista historiográfico.Publicación La Confederación Nacional del Trabajo en el Estado español: reorganización y crisis (1973-1980)(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Facultad de Geografía e Historia. Departamento de Historia Contemporánea, 2016-01-21) Casado Gil, María Reyes; Alted Vigil, AliciaEn esta tesis doctoral se estudia el movimiento anarcosindicalista que con el nombre Confederación Nacional del Trabajo se desarrolló en España en el marco histórico de la Transición a la democracia. El arco temporal estudiado y las características de los procesos desarrollados a lo largo de estos ocho años han permitido establecer tres etapas de desarrollo: - Primera etapa, 1973-1975: los primeros pasos reorganizativos de la organización sindical, concebida como heredera y continuadora de la histórica CNT, se realizaron en el tardofranquismo, una fase embrionaria y de marcado carácter anarquista, ideología que los nuevos movimientos sociales había devuelto a la actualidad en la década de 1960 y que en España presentó la peculiaridad de entroncar con su pasado anarcosindicalista. Este trabajo de reconstrucción se realizó en el interior de España y al margen del exilio cenetista, sin aliados políticos, una mínima infraestructura, fuentes de financiación y experiencia sindical reciente, con un fuerte componente de esfuerzo individual y voluntarismo; estuvo integrado por ancianos cenetistas, miembros de la denominada y casi inexistente generación puente y jóvenes libertarios de nueva hornada, que participaron a título individual o desde grupos de afinidad de carácter anarcosindicalista y colectivos de oposición al régimen gestados en las universidades, las Luchas Autónomas y el mundo del trabajo. - Segunda etapa, 1976-1977: tras la muerte de Franco, se produjo la reorganización efectiva de la Confederación. En estos años, de efervescencia política y afiliación ciudadana a sindicatos y partidos políticos, la CNT se reorganizó desde el punto de vista orgánico y dio a conocer a la sociedad española sus propuestas sociales, sociales y sindicales. 1977 fue el año de los actos públicos multitudinarios de la CNT (celebrados en la localidad madrileña de San Sebastián de los Reyes, Valencia y Barcelona). La anarcosindical consiguió en solo año y medio, desde diciembre de 1975, momento en que se celebró la asamblea constitutiva de la CNT de Madrid, hasta septiembre de 1977, en el que se organiza la primera huelga de gasolineras de Barcelona, reconstruir la estructura organizativa tradicional de la Confederación y crecer cuantitativamente hasta el punto de valorarse desde un punto de vista social y político con posibilidades reales de aglutinar el descontento social generado por la situación económica y el propio proceso de transición política. - Tercera etapa, 1978-1980: en esta fase, la CNT vio interrumpido su crecimiento. Una vez que, tras la celebración de las primeras elecciones democráticas, el gobierno de Adolfo Suárez diseñó y puso en marcha el nuevo modelo sindical español, los problemas sindicales y políticos a los que tuvo que hacer frente la Confederación se mostraron irresolubles. En 1978, además, la Confederación sufrió una serie de reveses que dañaron gravemente su imagen pública, al quedar asociada a actividades violentas de corte terrorista, siendo el caso más conocido y que mayor cobertura mediática tuvo el denominado Caso Scala. Este tipo de acciones, imputadas a la CNT por la policía y los medios de comunicación, alentó la teoría de la conspiración en los círculos confederales, que ya empezaban a mostrar síntomas de cansancio tras el esfuerzo reorganizativo realizado. La celebración de un Congreso Nacional entre el 8 y 16 de diciembre de 1979 permitió a la anarcosindical reafirmarse en los planteamientos ideológicos clásicos y su estructura orgánica tradicional, conectando su presente con la organización histórica, pero de la experiencia vivida en los cuatro años precedentes los cenetistas solo pudieron llevar a las sesiones congresuales la confusión vivida en los locales sindicales, consecuencia directa del acelerado proceso de reconstrucción confederal, la anomalía orgánica que suponía la existencia de un exilio anarcosindicalista y las características del ya mencionado proceso de transición sindical.Publicación Conflicto armado en Guatemala y el lugar del Archivo Histórico de la Policía Nacional en la defensa civil de los derechos humanos(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Escuela Internacional de Doctorado. Programa de Doctorado en Historia e Historia del Arte y Territorio, 2021) Olmos Gómez, David; Alted Vigil, Alicia; Hoyos Puente, Jorge dePublicación La continuidad ideológica del carlismo tras la Guerra Civil(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Facultad de Geografía e Historia, 2009-06-01) Martorell Pérez, Manuel; Alted Vigil, AliciaPublicación La dictadura de Pinochet a través del cine documental. 1973-2014(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Escuela Internacional de Doctorado. Programa de Doctorado en Historia e Historia del Arte y Territorio, 2017-05-05) Barroso Peña, Gonzalo; Alted Vigil, AliciaLos vínculos entre el cine y la historia plantean la necesidad de explorar el cine documental no sólo como fuente para el estudio del pasado, sino también como soporte de un discurso histórico de naturaleza meramente audiovisual. A lo largo de esta tesis doctoral se analiza un periodo concreto de la historia de Chile, en este caso la dictadura de Pinochet, a través del cine documental realizado entre 1973 y 2014. Este estudio se divide en dos bloques: un primer bloque teórico en el que se exploran los lazos que unen el cine y la historia y que sirve de contextualización al periodo histórico estudiado, y un segundo bloque de carácter práctico en el que se analizan los temas, las funciones, los recursos narrativos, los personajes, la distribución cinematográfica y el mensaje ideológico que predominan en el cine documental sobre la dictadura de Pinochet. La transformación del relato cinematográfico sobre dicho periodo de la historia reciente de Chile se encuentra marcado por cuatro acontecimientos que fijan los periodos en los que se divide esta investigación: el golpe de Estado de 1973, la Constitución de 1980, la recuperación de la democracia en 1990 y la muerte de Pinochet en 2006.Publicación Los evacuados de la Guerra Civil de la provincia de Toledo (1936-1939)(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Facultad de Geografía e Historia. Departamento de Historia Contemporánea, 2016-01-14) Sánchez-Collado Jiménez, Juan Carlos; Alted Vigil, AliciaLa investigación se centra en el estudio del fenómeno de los desplazados de la Guerra Civil Española durante 1936-1939 a través de los evacuados procedentes de la provincia de Toledo. La estructura del trabajo sigue una línea cronológica.Además de una Introducción y unas Conclusiones finales, el Capítulo Preliminar, que abarca todo el periodo de la conflagración, contextualiza la Guerra Civil en su entorno espacial y temporal y profundiza en una de sus principales consecuencias, los desplazados y evacuados. También realiza una síntesis de la legislación republicana de ayuda a la población refugiada y hace un primer acercamiento a aspectos como la organización e internacionalización de la ayuda humanitaria dirigida a los refugiados así como al problema de su coste económico. Los dos primeros capítulos,deuna Primera Parte,parten de las operaciones militares desplegadas en la provincia de Toledo desde el 28 de agosto de 1936. Como había sucedido en Andalucía y Extremadura, el Ejército de África tomó las localidades de Toledo de forma muy violenta y provocó el éxodo de la población. Madrid fue la dirección principal de las caravanas de campesinos de los municipios de la carretera de Extremadura y Toledo, por lo que el Tercer Capítulo se interesa por la forma en la que se llevaron a cabo estas evacuaciones durante septiembre y octubre de 1936, las condiciones de vida y alojamiento de los evacuados ya en la capitaly la saturación y colapso de la ciudad. Desde una capital de la República sobre poblada y preparada para el asedio, efectivo desde noviembre de 1936, con déficits de vivienda y abastecimientos y sometida a los bombardeos de la aviación, los recién llegados de las zonas de guerra, junto con los madrileños no aptos para la defensa, comenzaron a ser evacuados de una manera planificada,y esta ya es materia del Cuarto Capítulo, el primero de una Segunda Parte. Las campañas de evacuación promovidas entre noviembre de 1936 y 1937, la evolución de la evacuación, los problemas derivados de la carestía así como la evacuación de los "niños de Madrid" son temas tratados a lo largo delos capítulos Cuarto y Quinto. Dentro de la Tercera Parte, los capítulos del sexto al noveno se centran en los destinos de los evacuados por la retaguardia republicana durante el primer año y medio de la guerra. Por el sur de Toledo (Capítulo Sexto), el resto de provincias de la actual Castilla-La Mancha y Andalucía oriental (Capítulo Séptimo), Comunidad Valenciana y Murcia (Capítulo Octavo) y Cataluña (Capítulo Noveno). La presencia de los evacuados en las localidades de acogida tendió a agravar, de forma determinante, los problemas de vivienda y a mermar los servicios más esenciales, y este es uno de los asuntos analizados.El exceso de población, el miedo a la propagación de enfermedades relacionadas con la mala alimentación, el hacinamiento y la falta de higiene, sobre todo en las ciudades; la escasez de abastecimientos, las subidas de los precios, el aumento de la demanda con el plus demográfico de los desplazados y las limitaciones de la oferta de productos; el coste añadido de los refugiados para las economías de las familias por prestaciones como el alojamiento o la manutención,la forma de financiar la atención y la ayuda y cuestiones como la convivencia entre la población autóctona y la refugiada son, entre otros, algunos aspectos también tratados. Sin olvidar la importancia de partidos políticos o sindicatos y las organizaciones solidarias internas y externas en tiempos de conflictos o la necesidad de una legislación republicana para con los refugiados en este periodo. La Cuarta Parte se extiende desde 1938 hasta el final, los últimos 15 meses de la guerra. En el Capítulo Décimo hacemos otra vez un seguimiento del fenómeno de los evacuados y refugiados por la retaguardia, pero incidimos ahora también en aspectos más concretos de la vida cotidiana. Entre 1938 y principios de 1939 se deterioró aún más la economía.Publicación Género y trabajo. La inserción laboral en Francia de las exiliadas republicanas españolas (1936-1956)(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Escuela Internacional de Doctorado. Programa de Doctorado en Historia e Historia del Arte y Territorio, 2022) Negrete Peña, Rocío; Alted Vigil, Alicia; Alonso Carballés, JesúsPublicación La inmigración rumana en Aragón : contexto sociopolítico y evolución histórica (1990-2011)(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Facultad de Geografía e Historia. Departamento de Historia Contemporánea, 2013-07-15) Garris Mozota, Jorge; Alted Vigil, AliciaPublicación Manifestaciones creativas y plásticas en torno a la ayuda humanitaria suiza en España y el sur de Francia (1937-1943) (Resumen)(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Escuela Internacional de Doctorado. Programa de Doctorado en Historia e Historia del Arte y Territorio, 2017) Schmöller, Natascha; Alted Vigil, AliciaPublicación Misiones católicas en el exterior: capellanes de emigrantes en Bélgica (1956-1986) (Resumen)(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Escuela Internacional de Doctorado. Programa de Doctorado en Historia e Historia del Arte y Territorio, 2021) Ponce Nieto, Ana Isabel; Alted Vigil, AliciaPublicación El movimiento de enseñantes durante el tardofranquismo y la transición a la democracia : 1970-1983(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Facultad de Geografía e Historia, 2010-02-05) Groves, Tamar; Alted Vigil, Alicia; Rein, RaananEsta investigación tuvo como propósito estudiar las movilizacionesde maestros durante la transición a la democracia en España. El análisis demuestra que los movimientos sociales que surgieron en aquella época no fueron un mero síntoma del cambio político sino que cumplieron un papel importante en la desintegración de las instituciones de la dictadura, en la formación de conceptos democráticos entre los ciudadanos y la recuperación de la sociedad civil en el contexto local. Más importante aún, las actividades colectivas que iniciaron los maestros y otros sectores profesionales, cambiaron los procedimientos autoritarios que regían las vidas cotidianas de los ciudadanos. Las movilizaciones de maestros surgieron en todo el país y este trabajo los analiza tanto en el plano nacional como en el local. El análisis del plano nacional aborda la lucha sindical y la lucha pedagógica que llevaron a cabo los maestros con la idea de democratizar al sistema educativo. El análisis del plano local trata de dos contextos sociales muy diferentes: la urbe dinámica de Madrid y la provincia agraria de Salamanca. Esta elección permite ofrecer una visión compleja de los diferentes aspectos de las movilizaciones de maestros. El caso de Madrid revela sus consecuencias en un ámbito cercano a los focos del poder y el caso de Salamanca, su repercusión en una sociedad rural y conservadora.Publicación Los oficios cinematográficos en España (1895-1936)(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Facultad de Geografía e Historia. Departamento de Historia Contemporánea, 2016-01-15) López Martín, Laura; Alted Vigil, AliciaEl trabajo analiza la evolución de la cinematografía española entre los años 1895 y 1936 partiendo de la idea de cinematografía como proceso cultural multidisciplinar, inmerso en un proceso empresarial y cuyo resultado es fruto del trabajo y las relaciones establecidas por el conjunto de los equipos y sectores. El trabajo centra la atención en el proceso empresarial cinematográfico y en la tecnología utilizada con el objetivo de estudiar el origen y desarrollo de los diferentes oficios cinematográficos desde la concepción de la película hasta su exhibición ante el público, es decir, desde su inicio hasta su especialización en los sectores de la producción, la exhibición y la distribución. El cinematógrafo surgió como una herramienta científica que fue rápidamente adaptada a los espectáculos visuales existentes. Para que fuera posible este cambio tanto la tecnología utilizada, en el rodaje y la proyección, como las fórmulas de comercialización debieron especializarse generando diferentes oficios que posibilitaran dar servicio a la demanda de películas. El trabajo parte de los espectáculos precinematográficos para conocer la procedencia de los pioneros de la industria cinematográfica. Una vez realizadas las primeras exhibiciones se analiza, a partir de las características de las cámaras y proyectores, los cometidos de los primeros operadores, sus condiciones de trabajo y la función y procedencia de los primeros productores. Se establecen los elementos clave del nacimiento de la cinematografía, a partir de los espectáculos basados en la imagen, especialmente la proyectada, de la fotografía y su uso científico y espectacular y finalmente en relación con el teatro. Esto permite conocer el origen del cine necesario para comprender el trabajo de los pioneros. Iniciada la venta de cámaras y proyectores se establecieron las primeras empresas cinematográficas que se desarrollan durante una fase de novedad en la que prácticamente una única persona puede llevar a cabo todo el proceso. Tras la fase de novedad la cinematografía sufre una crisis de la que sale gracias a los cambios realizados en las películas que a partir de los cambios en los aparatos utilizados y a la especialización de los trabajadores. Finalizada la primera década, la cinematografía queda dividida en tres sectores. A partir de este momento los cambios tecnológicos son comparativamente menores hasta la incorporación del sonido, sin embargo la división y especialización laboral se mantiene para hacer frente al aumento de la demanda de películas. En el estudio de cada uno de los sectores, se ha trazado en primer lugar su evolución y se han señalado algunos de los conflictos del sector que afectaban al trabajo en el mismo. En el caso de la producción tras ver la evolución se han estudiado los oficios que intervienen en la producción de una película desde la organización del rodaje hasta que la película ha sido finalizada y puede ser comercializada. En el caso de la exhibición se ha estudiado la figura del empresario de espectáculos, y de las salas como espacio de trabajo, y se ha centrado el estudio en la figura del operador proyeccionista y el personal auxiliar de sala junto con los músicos. Finalmente, se estudia el sector de la distribución y a sus trabajadores, sector al que consideramos clave al manejar las posibilidades tanto del sector de la producción como del de la exhibición.Publicación Los profesionales cinematográficos republicanos exiliados en México en los años cuarenta y cincuenta(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Facultad de Geografía e Historia. Departamento de Historia Contemporánea, 2016-02-04) Chaumel Fernández, Jorge; Alted Vigil, Alicia; Rodríguez Rodríguez, JuanEl exilio republicano español pertenece al fenómeno de los refugiados característico de la primera parte del s.XX, derivado de los cambios políticos y territoriales provocados por la I Guerra Mundial. Aproximadamente 500.000 personas salieron de España al finalizar la guerra. Francia y México fueron los principales países de acogida. A México llegaron alrededor de 25.000 españoles. En su mayor parte representaron trabajadores cualificados y profesionales formados en la República. En el caso de los profesionales cinematográficos, pusieron al servicio del Cine Mexicano toda su experiencia constituyendo uno de los pilares de la Edad Dorada del Cine Mexicano. Los exiliados republicanos que se dedicaron a la industria cinematográfica en México fueron testigos del desarrollo del cine español durante la Monarquía, República y Guerra Civil, así como la llegada del cine sonoro, la creación de una industria con grandes objetivos y su destrucción durante el conflicto civil. Su exilio en México se puede dividir en dos etapas separadas por la Segunda Guerra Mundial. La primera caracterizada por la esperanza del regreso a España y la visión del exilio como un fenómeno temporal. El conservadurismo de las potencias aliadas descubrió en Franco un aliado ante la Guerra Fría que se avecinaba. Ello originó el segundo período en el que, pérdidas las esperanzas, los exiliados en México prepararon su estancia fija y su organización, entre la aceptación de la nueva realidad y la adaptación en la cultura mexicana. Los años entre 1943 y 1945 fueron los de la toma de consciencia de su estatus como exiliados. La huella de su obra quedó impresa en el celuloide a pesar de diversos problemas que caracterizaron la primera parte de su carrera mexicana.Estos problemas se pueden dividir en tres grandes campos. Como exiliados por la resistencia de cierta parte de la sociedad mexicana a su adaptación, como cineastas extranjeros ante la política proteccionista de los sindicatos y como profesionales cinematográficos debido al incipiente monopolio de estructuras administrativas. La comunidad exiliada, acogida en México, se organizó en un entramado de relaciones profesionales y sociales. Los refugiados republicanos en México no perdieron la relación y se dieron multitud de conexiones en todos los aspectos. Sus aspiraciones y nostalgias fueron representadas en forma de obras filmadas entre las que destacó un españolismo que inundó las carteleras mexicanas de los años cuarenta y cincuenta.Las adaptaciones de obras literarias, revisiones historicistas, y situaciones sociales relacionados con España se sucedieron en las pantallas. El exiliado republicano había mostrado su importancia como espectador de cine y se le había dedicado varios géneros de carácter hispano. Entre los trabajadores que lo hicieron posible, los refugiados fueron multitud. Así su carrera, mano de obra e influencia fueron cada vez más valorados y protagonizaron un buen hacer en la industria que los había acogido reconocido en los siguientes años. Alcanzaron cierto prestigio, independientemente de la calidad de los proyectos y de la crisis del cine mexicano. Produjeron una extensa filmografía que plagó la situación fílmica del momento con prolíferas carreras y algunas obras maestras. La mano de obra y creativa española fue considerada y contratada consiguiendo cierta reputación en todos los ámbitos de la cinematografía. Paralela a esta profesionalización y reconocimiento se dio la adaptación total a la sociedad y la cultura mexicana. La imposibilidad de volver a su país de origen junto al desarrollo laboral en la nación de acogida impulsó esta adaptación y su posterior mexicanización creando un nuevo tipo de cine mexicano. Los profesionales cinematográficos españoles que se vieron obligados a huir y buscar refugio en México contribuyeron a un enriquecimiento cultural que se extendió en todos los sectores de la cultura y la intelectualidad mexicanas.Publicación La resistencia tradicionalista a la renovación ideológica del Carlismo (1965-1973)(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Facultad de Geografía e Historia. Departamento de Historia Contemporánea, 2016-01-29) García Riol, Daniel Jesús; Alted Vigil, AliciaINTRODUCCIÓN El estudio de la historia del Carlismo, a través de sus ahora 182 años de existencia formal, ha generado una muy abundante producción científica. Su desarrollo, vicisitudes, cambios y transformaciones han atraído siempre a un importante número de historiadores españoles y extranjeros a lo largo del tiempo. Si el conocimiento del Carlismo en el siglo XIX está actualmente muy avanzado, no sucede lo mismo con su evolución durante todos los periodos del siglo XX. Bien es cierto que momentos como la Segunda República y la Guerra Civil han sido analizados con profusión; y que la "redefinición ideológica" que experimenta el movimiento desde los años sesenta del pasado siglo ha contado con una cuantiosa producción escrita. Sin embargo la abundancia de publicaciones no siempre implica clarificación de los problemas y, en ocasiones, lo que se provoca es una avalancha de información que debería ser tratada y contrastada de una forma diferente y más sintética. Esta Tesis se centra precisamente esa última época, de mediados de los años sesenta del siglo XX, en la que se va a gestar e! cambio, la siempre sorprendente transmutación de un pensamiento tradicionalista clásico en un conjunto de alternativas conducentes al socialismo, el federalismo y la autogestión. El título elegido para la presente Tesis Doctoral:La resistencia tradicionalista a la renovación ideológica del Carlismo (1965-1972), surge del Trabajo de Fin de Máster presentado en esta Universidad Nacional de Educación a Distancia en octubre de 201 O y que llevaba por título: El Carlismo en la década de 1960: de la ilusión sucesoria a la oposición antifranquista. De entre sus conclusiones destacaba la que abría el camino a esta Tesis: analizar cuál había sido el comportamiento del tradicionalismo carlista en los años sesenta y primera mitad de los setenta, ampliando las fuentes y las áreas de investigación. Por todo ello pretendemos estudiar, la génesis, desarrollo y separación de los grupos tradicionalistas de la disciplina del Carlismo oficial y su final ruptura con el Partido Carlista de Carlos Hugo de Barbón Parma. Todo ello inserto en el arco cronológico que media entre la Reunión de la Junta Nacional Carlista en el Castillo de Puchheim en Austria (1965), clave para lo que sucedería años después, el Congreso Nacional Carlista de febrero de 1966, la potenciación pública de la figura de Carlos Hugo en España y las consecuencias para la causa carlista de la .proclamación por Franco ante las Cortes Españolas de Juan Carlos de Barbón como su sucesor a título de Rey (1969) y la ruptura del marco común en el que tradicionalistas y carloshuguistas pudieran convivir puesta de Manifiesto en el 11° Congreso del Pueblo Carlista de 1972. DESARROLLO TEÓRICO Capítulo 1°: El Carlismo bajo el franquismo entre 1939 y 1965 Capftulo 2°: El Congreso Nacional Carlista de 1966: la lucha por el poder y el camino hacia la oposición al franquismo Capítulo 3°:La resistencia tradicionalista a la renovación ideológica del Garlismo: algo más que un pulso entre continuistas y renovadores Capftu/o 4°: Visiones femeninas sobre un Carlismo en transición Capítulo 5°: La ilusión de un rey carlista Capítulo 6°: El tradicionalismo carlista fuera del Carlismo oficial en los años setenta Capítulo 7°: De ''la deserción de la dinastfa" a los tres Garlismos del siglo XXI CONCLUSIÓNES 1) Lo acontecido en el Congreso Nacional Carlista celebrado en el Valle de los Caídos en febrero de 1966 supuso un momento de encuentro y debate real entre todas las tendencias internas presentes en el seno de Ja Comunión Tradicionalista. Este Congreso no supuso, como se ha mantenido por parte de la historiografía neocarlista, la ruptura definitiva con el régimen. De hecho, los congresistas consideraban llegado el momento de aspirar al poder a través de la participación activa en puestos y cargos de responsabilidad de la estructura institucional del franquismo. Tampoco se reclamó la evolución ideológica aunque s! la actualización de los postulados del Carlismo. 2) La figura de Don Javier de Borbón Parma, rica en matices, responde a la de un personaje contradictorio que adoptó decisiones polémicas, unas veces de forma personal y otras bajo la influencia directa de su hijo Carlos Hugo, como lo demuestran las anotaciones, correcciones y rectificaciones halladas en su correspondencia personal. Su entrega a la causa carlista es indudable así como sus deseos de reforma política y de justicia social para España; pero no lo es menos su frecuente testimonio de vinculación a la Casa Real de Francia. Resulta cuando menos extraño que una misma persona apueste, en teoría, por el socialismo, et federalismo y la autogestión al sur de los Pirineos y participe con ardor en los movimientos legitimistas y realistas franceses. Más allá de la imagen que, interesadamente muestran sus biógrafos más apasionados, se convirtió a buen seguro, en un instrumento de legitimación en manos de su heredero Carlos Hugo hacia una deriva ideológica de inciertas consecuencias. Del análisis de su correspondencia personal se deriva una fe ciega en Carlos Hugo pero una ausencia notable de directrices de renovación ideológica de su puño y letra. Es pues imprescindible una revisión biográfica de la figura histórica de Don Javier de Barbón Parma sobre todo la de los años que median entre 1968 y su fallecimiento en 1977. 3) ¿Hasta qué punto la remota posibilidad de un rey carlista elegido por Franco podía trastocar estos planes de renovación y evolución ideológica?. Creemos que la posibilidad de la sucesión se dibujó en el horizonte cronológico que se extiende entre 1962 y 1968, pero siempre en la persona de Carlos Hugo y nunca en la del "Viejo Rey Javier''. Por ello el Carlismo siguió colaborando con el régimen franquista más allá de la versión que afirma la existencia de una ruptura clara desde 1966. El abandono de los "secretarios" de Carlos Hugo en 1967 se debe no sólo a su desgaste político enfrentándose a los continuistas del Carlismo, sino a que el propio Carlos Hugo albergaba aún esperanzas con respecto a la sucesión. En todo caso esa colaboración con el régimen se mantuvo hasta la destitución de José María Valiente en 1968. El fin del sueño sucesorio se certifica definitivamente con la expulsión de los Barbón Parma en diciembre de ese año. Aquí sí el Carlismo pasa definitivamente a la oposición total a la dictadura, y la Comunión Tradicionalista se convierte en 1969 en el Partido Carlista; cambio de denominación que en el Congreso Nacional Carlista de 1966 fue rechazado por amplia mayoría. 4) Los cambios ideológicos impulsados por Carlos Hugo y sus secretarios constituyeron el principio del fin para el Carlismo contemporáneo. l De ser una fuerza pujante, popular y en alza a mediados de la década de los sesenta, pasa a ser un partido escorado hacia un izquierdismo que los militantes de más largo recorrido nunca acertaron a comprender. Quizá una línea política más pragmática y posibillsta, centrada en la Dinastía e integradora de corrientes hubiera podido dar frutos más apetecibles. Difícilmente el de la sucesión de Franco, puesto que el dictador nunca pensó realmente en esa posibilidad, pero quizá sí el del hallazgo de un espacio político de cara a la Transición democrática en la que el Carlismo, minoría parlamentaria desde más de un siglo y medio, quizás hubiera tenido un espacio propio y más definido. La interpretación libre e interesada de la historia del Carlismo para transformarlo, de movimiento contrarrevolucionario, profundamente católico, foralista y monárquico; en una fuerza revolucionaria, de libre conciencia, federalista y socialista autogestionaria, sólo pudo convencer a los dirigentes que impulsaron tales cambios. La cúpula del poder, con Don Carlos Hugo al frente, vislumbró un sueño utópico y se propuso conseguirlo frente a la realidad mayoritaria de una masa carlista a quien se trató de adoctrinar desde la base, con muy escaso éxito, a pesar de la propaganda. 5) En su deseo por avanzar hacia unas tesis consideradas de imprescindible aplicación, el aparato del Partido Carlista desvertebró la formación, expulsando, amonestando y manipulando aquellas realidades que contravenían sus propósitos. Este clima de secretismo, favoritismo y autocomplacencia, puso en guardia a las bases y supuso el alejamiento o el enfrentamiento directo con los dirigentes regionales y locales Para desconsuelo de sus seguidores, la Dinastía Carlista se tornó política, abandonando los deberes de amparo y equidistancia de todas las corrientes del Carlismo. La imposición de la figura "pacto pueblo-dinastía" situaba la figura del monarca al borde del precipicio y al capricho de los acontecimientos. El progresismo de Don Carlos Hugo adoleció de control y la inusitada aceleración que imprimió a los cambios, por él y su equipo propuestos, condujo al Partido Carlista a la destrucción. Por otro lado su hermano, Don Sixto Enrique, sucumbió a la tentación integrista y optó por frenar en seco todo cambio o transformación saludable del Carlismo y anclarlo en unos presupuestos inmovilistas. La nave de la Historia partía y, mientras Don Carlos Hugo saltó por encima de ella, sobrepasándola, Don Sixto no alcanzó a tocar su borda. El Carlismo estaba condenado a desaparecer como partido de masas.Publicación La televisión en Asturias (Resumen)(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Facultad de Geografía e Historia. Departamento de Historia Contemporánea, 2017-06-20) Martín Antón, Javier; Alted Vigil, AliciaPublicación Una universidad posible en tiempos de Jaime Benítez (1942-1972). Los intelectuales españoles acogidos en la universidad de Puerto Rico a raíz de la guerra civil española(Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Facultad de Geografía e Historia. Departamento de Historia Contemporánea, 2016-01-27) Ruiz Sastre, Emilio F.; Alted Vigil, AliciaA Puerto Rico llegaron varias decenas de refugiados españoles a raíz de la guerra civil de 1936. La mayoría de ellos eran profesionales, científicos y profesores universitarios. Aunque se conocía esta historia, no se sabía ni de lejos su alcance e importancia. Nunca se había iniciado una investigación sistemática, aunque las informaciones de acarreo aparecían en multitud de publicaciones. En Puerto Rico, como parte de los Estados Unidos de América, se mantuvo la legalidad vigente en cuanto a las actuaciones derivadas de la guerra civil española de 1936. Es necesario recordar que las leyes se votaban en un Congreso elegido de manera democrática, y que eran el reflejo de lo que quería la sociedad de los Estados Unidos y por consiguiente de Puerto Rico. Los exiliados españoles, el exilio en Puerto Rico, las vidas insustituibles de tantos y tantos compatriotas no serían entendidas fuera de este contexto. El exilio intelectual español en Puerto Rico es tan relevante o significativo, como el de otros países del entorno, aunque menos numeroso. A Puerto Rico llegaron figuras de primer orden y la tierra de acogida fue para todos ellos una escuela de convivencia y para casi todos llegó a constituir una oportunidad única y diferente, rica y significativa. Cuando se fueron decidiendo a vivir como "puertorriqueños" adquirieron todos los beneficios que aquella sociedad tuvo a bien darse, la de la libre circulación por los Estados Unidos, que se quiera o no ya entonces constituía una realidad demasiado fuerte como para ponerla en duda y mucho menos negarla. Teniendo todo esto en cuenta, con los personajes del exilio, lo que verdaderamente importaba era ir reconstruyendo el argumento de sus vidas para llegar a conclusiones enriquecedoras. Ya que no estamos estudiando un exilio cualquiera sino el de los mejor preparados, y era indispensable poner en claro su obra, su dimensión y alcance. La gestión de Jaime Benítez como Rector de la Universidad de Puerto Rico es tan mencionada y repetida como desconocida. Se ha convenido desde un principio que su labor fue relevante, avanzada para su tiempo, pero a continuación se ha dejado entrever que su éxito no fue tan grande y que además concurrieron condiciones tan favorables que le restan valor a sus esfuerzos. Por otro lado Benítez no se sirvió de su condición de persona conocida, influyente, aunque no poderosa, lo cual en apariencia para aquellos que sólo ven lo superficial y pasajero le quitan importancia para aumentar la suya o justificar un fracaso. Con estoicismo español soportó la dura carga de la soledad en una tarea que nunca sabría si era la acertada por desconocida, la cual aceptó sacar adelante por propia voluntad y con conocimiento de causa. Su visión del mundo hispánico en convivencia con el mundo anglosajón, más bien norteamericano, fue comprensiva e integradora, a sabiendas de que había temas que no eran precisamente fáciles de conjugar, principalmente por la incomprensión de los norteamericanos hacia el mundo hispánico, sólo disculpable por ignorancia. Benítez supo mucho antes que cualquier otro hombre en Puerto Rico que la vida es una faena que se hace hacia adelante. En esto fue decisiva su afición a la lectura, cosa que adquirió siendo muy joven. Su encuentro con la filosofía clásica en lenguas que no eran la suya le llevo a buscar un leguaje filosófico en español y lo encontró con Ortega y Gasset. Su relación con él fue vibrante, esclarecedora, y significativa. No creo que haya escrito una sola página de su vida que no haya sido pensada teniendo en cuenta la filosofía de su maestro distante, al que tan solo vio en dos ocasiones. No es fácil dar una explicación a la labor que realizó Benítez respecto a los exiliados españoles y de otros procedentes de cualquier otra parte del mundo. En 1939, incluso antes de que la guerra civil española acabara, ya había caído en la cuenta de la enorme tragedia que se cernía sobre el mundo y que nadie parecía querer poner fin.