Un desafío al control público: modelo de evaluación aplicable a las políticas y programas de gasto de un organismo público

Merino García, Beatriz. Un desafío al control público: modelo de evaluación aplicable a las políticas y programas de gasto de un organismo público . 2019. Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Escuela Internacional de Doctorado. Programa de Doctorado en Seguridad Internacional

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Título Un desafío al control público: modelo de evaluación aplicable a las políticas y programas de gasto de un organismo público
Autor(es) Merino García, Beatriz
Resumen La evaluación ha sido concebida como una técnica de análisis dentro de la esfera privada en lo que a priori parece ser una herramienta poco aplicable a la Administración Pública. El control económico financiero permanente y la auditoría, entendidos en un contexto de control interno y externo aplicado a políticas públicas, arrojan datos cuantificables en un momento posterior a su entrada en funcionamiento. El hecho de poder aplicar técnicas evaluativas a esas políticas y ver los efectos y los resultados de las mismas antes de que se puedan poner en práctica, podrían dar respuestas a la necesidad de rendición de cuentas en la inversión pública y en la investigación social. En este contexto nace la idea de evaluación encaminada a una evaluación de políticas y acciones públicas, de forma conjunta con las ideas de racionalización y modernización de los sistemas públicos; la sociedad avanza y con ella los métodos para obtener resultados probabilísticos antes de poner en marcha las políticas públicas. Asociada a los procesos de racionalización de las decisiones presupuestarias y al uso de métodos de management (gestión) en las grandes empresas, la evaluación es un acto político esencialmente democrático, necesario para mejorar la eficacia del Estado, logrando una mejor asignación de los recursos y, por ende, consiguiendo economías públicas. De esta manera, junto con el denominado principio de economía de medios y eficacia en la asignación y utilización de los recursos públicos, se une el principio básico del servicio público y se recoge el derecho que tiene el ciudadano a la calidad en la prestación de los servicios públicos, estableciéndose un límite fundamental a la posibilidad del gestor de minimizar el coste de los mismos. El hecho de considerar el término calidad al evaluar las políticas públicas introduce una serie de complicaciones de cálculo que no se contemplan en la contabilidad analítica poniéndose de manifiesto cómo la Administración se encuentra obligada a evaluar tanto la consecución de los objetivos asignados presupuestariamente a los gestores de los distintos programas de gasto, como a la eficacia y eficiencia en la utilización de los recursos presupuestarios establecidos para ello. Considerando que evaluar es establecer un juicio de valor sobre una política, programa o servicio público, la evaluación puede ser un aspecto central del proceso de políticas, programas y servicios. Podremos decir que es un aspecto crucial por razones utilitarias, ya que proporciona a los que toman decisiones algún tipo de valoración acerca de hasta qué punto los programas que han diseñado y llevado a cabo han alcanzado o están alcanzando los objetivos deseados, contribuyendo a mejorarlos, ayudando a decidir si es conveniente continuarlos, revisarlos o crear otros nuevos que posibiliten la consecución de los resultados deseados. La presente tesis pretende analizar la existencia de una nueva técnica para cotejar resultados y ampliar el horizonte del control combinando el reto impuesto por los análisis del siglo XXI de establecer modelos mixtos de evaluación (cuantitativos y cualitativos) con el objetivo fundamental de entender “qué efectos”, el “porqué” y el “cómo”, lo que viene denominándose innovation journey. Desarrollar un modelo de evaluación propio, permitiría disponer de un estándar representativo con carácter institucional, permitiría identificar mejoras y diseñar los planes con los que poder conseguir las mismas, compararía los resultados obtenidos, no sólo a nivel institucional sino a nivel de la esfera privada, apoyaría la certificación de la calidad del servicio prestado, facilitaría la autoevaluación y la evaluación externa más allá del control ejercicio por la Intervención General del Estado o el Tribunal de Cuentas, fortalecería con evidencias tangibles la consecución de esos resultados y sopesaría que las mejoras introducidas en los procedimientos evaluativos arrojan mejores resultados que sus predecesores. Además de todas estas singularidades, permitiría integrar los resultados del proceso evaluativo con la planificación de mejora continua y mostraría a la ciudadanía la evidencia de que los recursos económicos detraídos de sus ahorros han tenido el fin que se propuso desde el comienzo de la gestión. Y aun cuando la evaluación no debiera verse afectada por la financiación, lo cierto es que los resultados del control y la evaluación pueden aspirar a ser un factor importante pero no el único a tener en cuenta en el proceso presupuestario. La utilidad de los sistemas de control y evaluación se verá potenciada en el proceso presupuestario en la medida en que el Ministerio afectado desarrolle su capacidad para confrontar y gestionar con eficacia los conflictos que surjan al identificar necesidades y para reasignar recursos a nuevas prioridades. La integración de la evaluación en el control del proceso presupuestario puede proporcionar grandes resultados, incluso en términos de reducción del déficit, en la medida en que incorpore como criterios de éxito la adaptación y el aprendizaje en el diseño de las políticas públicas. El verdadero valor de los sistemas de evaluación reside en el proceso de valoración más que en sus resultados, entendido como un proceso interactivo y abierto al aprendizaje por parte del controlador o evaluador o del gestor. Este proceso de evaluación podría orientarse a la consolidación de los canales de comunicación e interacción entre decisores, participantes y grupos de interés (stake holders) en general de la política o programa presupuestario en cuestión. Esto aumentaría la coherencia interna del presupuesto ya que permitiría reducir la incertidumbre innecesaria o perfectamente evitable que se plantea en todo proceso de asignación de recursos, máxime en un escenario de recesión económica como es el analizado. Es necesario que este sistema de control funcione con la independencia suficiente y se le otorguen los medios, personal y recursos económicos necesarios para su implementación asignándole funciones, al organismo encargado de la evaluación, que puedan favorece las labores de control y evaluación de los servicios públicos, y de los recursos correspondientes, tanto en términos de control financiero, como de calidad para poder dar respuesta a las exigencias de una sociedad avanzada y democrática como la nuestra. Para poder abarcar los objetivos que marcarán esta consecución de referentes de eficacia, eficiencia y productividad debemos determinar los indicadores de una matriz de evaluación junto con unos mecanismos de control que son necesarios en todo procedimiento de gestión de recursos públicos. Adicionalmente se analizan las debilidades encontradas y las posibles modificaciones realizadas por el gestor para su fin. Los resultados obtenidos marcarán el rumbo de ese programa político en un sentido positivo o negativo, es decir, se constituirán como programas capaces de reflejar unos resultados deseables o, por el contrario, marcarán unas deficiencias tan insalvables que pueden llegar a producir el abandono de ese programa público antes de ser ejecutado. En definitiva, es una comparación con un patrón deseable que atiende a dimensiones vinculadas con objetivos o con capacidades como por ejemplo, tener la capacidad de anticiparse a errores futuros analizando los presentes, marcar el medio en el que nuestro programa pudiera verse afectado, cambiar gestores participantes en el programa. Lo que es evidente, es que la evaluación se mueve en unos parámetros donde es posible analizar la incertidumbre y las dependencias entre programas, de la misma manera que es factible analizar objetivos a corto, medio y largo plazo determinando diferentes escenarios presupuestarios. La máxima que surge en todo el proceso de evaluación de un programa público es que existe la posibilidad de definir objetivos habiendo antes obtenido evidencias que nos permitirán juzgar la consecución de los mismos; y esa tarea de evaluación puede ser aplicada ex ante (antes de), concomitante (durante), y ex post (después de) de las actividades desarrolladas. Y es, en este desarrollo, donde hemos descrito un modelo teórico de Informe de Evaluación, susceptible de ser elaborado por personal independiente al órgano evaluado; donde se confeccionarán las diferentes áreas seleccionadas que constituirán la matriz de la evaluación, a la par que se determinarán los indicadores aplicables a esos criterios. De la recogida de datos y su posterior análisis, derivará un informe sobre el que se realizarán las alegaciones pertinentes en caso de existencia de discrepancias y servirá como soporte básico para regular necesidades presentes y futuras, para gestionar de manera eficiente un crédito cada vez más limitado en este Ministerio y, en definitiva, para dar a conocer al evaluado cuanta información sea necesaria de cara a la optimización de su gestión. La evaluación debe ser una herramienta al servicio de la transparencia, la disposición y la mejora de la calidad democrática de las instituciones, útil para medir los impactos de las decisiones públicas facilitando la rendición de cuentas, la apertura de los procesos de gestión, fortaleciendo la posición de los ciudadanos, a título individual, pero también colectivo, como sociedad y otorgando la visión de la claridad en la esfera pública donde el ciudadano disponga de toda la información que requiera en el momento que la requiera y el órgano gestor sea capaz de racionalizar sus actuaciones y obtener unos resultados con unos ratios de éxito cada vez más superiores.
Materia(s) Economía
Editor(es) Universidad Nacional de Educación a Distancia (España). Escuela Internacional de Doctorado. Programa de Doctorado en Seguridad Internacional
Director de tesis Perdices Mañas, Jesus Alberto
Fecha 2019-12-03
Formato application/pdf
Identificador tesisuned:ED-Pg-SegInt-Bmerino
http://e-spacio.uned.es/fez/view/tesisuned:ED-Pg-SegInt-Bmerino
Idioma spa
Versión de la publicación acceptedVersion
Nivel de acceso y licencia http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0
info:eu-repo/semantics/openAccess
Tipo de recurso Thesis
Tipo de acceso Acceso abierto

 
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Creado: Sat, 01 Feb 2020, 00:04:50 CET